Para especificar lo que supone un sistema contable competente y adecuado, debemos precisar con antelación una serie de objetivos capaces de adaptarse a los requisitos y necesidades de la compañía. ¿Cómo debe ser dicho sistema contable?:
- En primer lugar se caracteriza porque debe ser comprensible y a la medida de sus usuarios. No hablamos tanto de lo que consideramos que se requiere como idealmente óptimo desde la dirección financiera, sino más bien nos referimos a lo que cada área responsable demanda.
- Además, debe de ser relevante y ventajoso para los usuarios; capaz de adaptarse a cada situación y encaminarse a ayudar en la gestión del negocio.
- Por último, debe de ser completa, verosímil y cierta para los usuarios la acepten desde un primer momento en la toma de decisiones, sin recelo a administrar partiendo de información ficticia o inexacta.