Podríamos definir el diseño organizacional como el medio para ejecutar la estrategia empresarial mediante una serie de elementos como son la estructura de labores, competencias y relaciones de autoridad dentro de las compañías. Su papel es imprescindible pues ayuda al negocio a establecer los objetivos dentro de la estructura.
Es importante que los cargos con mayor responsabilidad de la empresa conozcan los pormenores del diseño de sus organizaciones, lo que nos lleva a un escenario de posibilidades: mayor eficiencia, resultados más óptimos y por supuesto, un equipo comprometido en el trabajo. Con ello se conseguirá:
- la definición real de un servicio al usuario de gran calidad
- el iaumento de la rentabilidad
- la disminución de los costes operativos
- la eficiencia y del tiempo de inversión se verán mejorados
- los trabajadores estarán comprometidos con los valores de la empresa
- la puesta en marcha de un plan estable y seguro para administrar y hacer crecer su negocio.
En conclusión podemos decir que el diseño organizacional permite a las empresas mejorar la eficiencia y ser más competitivas. Es una herramienta de mejora continua de procesos y estructuras dentro de las organizaciones gracias al análisis previo que se ha llevado a cabo.